La Cátedra Santander de Empresa Familiar de la Universidad de Jaén celebró su VI Foro Jiennense de la Empresa Familiar, en el que se analizó la continuidad y la competitividad de este tipo de empresas a lo largo de diferentes generaciones.
Para hablar sobre este tema, se contó con la presencia de D. Joaquín Uriach, secretario general de Corporación Uriach, que mostró la experiencia de esta empresa fundada en 1838 y que se encuentra en su quinta generación.
Laboratorios Uriach es socio fundador del Instituto de la Empresa Familiar y una de las empresas más importantes del sector, comercializando productos tan conocidos como Biodramina, Dolmen, Utabon o Aero-Red. Esta empresa familiar ha aplicado, entre otros, la profesionalización gradual de los órganos de gobierno y la adaptación del papel de la familia a la evolución del negocio.
Joaquin Uriach destacó la importancia de las empresas familiares de ir evolucionando y adaptándose a las necesidades de cada momento; una adaptación que debe afectar a temas de sucesión, de órganos de gobierno, etc. El ponente quiso hacer hincapié en las ideas necesarias de evolución y adaptabilidad, de no hacer las cosas de la noche al día.
En su opinión, para que una empresa familiar perdure hace falta tener tanto un negocio como una familia detrás que funcione; hay que saber gobernar el negocio, pero también saber gobernar la familia, porque si no se hace bien esto segundo, por muy bien que vaya el negocio, éste no funciona. En este sentido, para Joaquín Uriach el secreto está precisamente en saber gobernar una familia, esto es, en tener unos valores arraigados que te hagan seguir para adelante, que le den sentido a lo que estás haciendo. Según él, aparte de tener orden en la familia, hay que saber estructurarla, saber poner unos órganos de gobierno que hagan funcionar la familia y la empresa y no hagan fracasar el negocio, evitando el conflicto.
Para este profesional, las ventajas de la empresa familiar son los valores, la continuidad, el trabajo a largo plazo, de pensar en el más allá. El compromiso que uno adquiere con este tipo de empresa, que es distinto de la no familiar. Un componente de compromiso muy importante, especialmente el factor emocional, que a veces puede llegar también a ser un inconveniente. Por ejemplo, el hecho de ser hermanos te une, pero si no te llevas bien puede desunir y acabar en guerras familiares. Por el contrario, entre las desventajas, Joaquín quiso destacar que si las hay, precisamente, se relacionarán con este aspecto; es decir, los valores familiares mal llevados que pueden acabar en conflictos emocionales y que pueden hacer que la familia se lleve mal y el negocio desaparezca.